Para un manejo terapéutico correcto es necesario un diagnóstico efectivo y esto se logra mediante la localización de la lesión y la evolución y como ha sido el avance de la patología.
La dosimetría requiere conocer ciertos conceptos y fórmulas como la densidad energética
(J/cm
2
), potencia del equipo
(mW), la superficie
(cm
2
) y el tiempo de aplicación
(seg).
La dosis se expresa en
Joules/cm
2
y es determinada según lo que se quiera tratar. Para las patologías agudas se necesita menores dosis y menor número de
sesiones; mientras que en los crónicos se utilizan mayores dosis y mayor número
de sesiones.
Emisión continua
En este caso la potencia de salida
coincide con la aplicada. Conociendo la superficie a la que alcanza a llegar el haz y la
densidad de energía
(j) que se necesita conseguir, puede determinarse el tiempo de duración del
tratamiento, según la expresión:
t = j / jw = (jx S) / P
Emisión pulsada
En este caso, la potencia de salida no es la misma cantidad de potencia a emitir. Se
necesitan tres items para definirla:
- Potencia pico o de salida
- Duración del pulso
- Frecuencia de pulsos.
La potencia media se calcula de la siguiente
manera:
- Energía de un impulso Ei = Pp x ti
- Potencia media Pm = Ei / (ti + tr)
Donde
Pp es la potencia de pico, ti es el tiempo de duración del pulso y
tr es el tiempo de
reposo. Puesto que la frecuencia
F es el número de veces que se repite un ciclo
(ti + tr) por
segundo, la potencia media será:
Pm = Pp x ti x F